La Palabra para miércoles, 23 abril 2025

Al verlo Jairo, se postró a sus pies, y le rogaba mucho, diciendo: —Mi hija está agonizando; ven y pon las manos sobre ella para que sea salva, y viva. Fue, pues, con él.

Marcos 5,22-24

Todo lo que pidáis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.

Marcos 11,24